(Dirección de Bienestar, 03 de diciembre de 2015) Durante la tarde del miércoles, el grupo investigador de la División de cultura presentó  los resultados de la investigación ‘Medición del impacto de las prácticas culturales en la calidad de vida de un grupo piloto de integrantes de los grupos artísticos institucionales’.

 

El Proyecto tuvo como objetivo demostrar con métodos científicos investigativos el alto impacto de proyección artística y cultural a los beneficiarios de los grupos artísticos institucionales, impactando de manera positiva en el desarrollo integral y la sana convivencia. 

 

Durante el periodo de investigación los profesionales diseñaron un sistema de medición conformado por un instrumento cuantitativo y dos estrategias cualitativas como las entrevistas semi estructuradas y grupos focales para corroborar la hipótesis planteada.

 

El muestreo se realizó en una primera etapa con 78 estudiantes integrantes de los grupos institucionales y en una segunda con 78 estudiantes que no practicaban ninguna expresión artística.  Entre las dimensiones analizadas se encuentran: bienestar físico; emocional; social; desarrollo personal y material.  


Dentro de los resultados arrojados en relación a las dimensiones anteriormente mencionadas se pudo concluir que “hay un impacto positivo en dimensión emocional y social; y de una manera paralela también se desarrolla bienestar físico y material. En conjunto esto permite que se desarrollen competencias y valores muy importantes para la vida” puntualizó Urrego.

 

Esto se refleja en las 309 personas entre estudiantes, docentes y administrativos de la UN vinculados actualmente a los Grupos Artísticos Institucionales quienes  disfrutan de una oportunidad de desarrollo integral, aprendizaje, crecimiento, sociabilidad y buen empleo del tiempo  libre.

 

El arte como humanizador

 

Durante la socialización el doctor Luis Roberto Amador  de la Facultad de Medicina dio una explicación científica  a la positiva  relación entre el arte y el comportamiento humano desde los comienzos de la humanidad.

 

En su ponencia  ‘El arte como mediador de la humanización’ expuso cómo desde tiempos remotos, los primeros humanos mostraban en su diario vivir movimientos armónicos y  patrones mediadores a través de expresiones artísticas. También recalcó la importancia de la herencia cultural a través de los genes y las pautas de crianza de los padres. 

 

“El arte y la estética nos hacen crecer, no hace expresar sentimientos y emociones además de fortalecer el trabajo en equipo” concluyó. 

 

El grupo investigador entregó como productos una memoria histórica y una memoria audiovisual que documentan el trabajo realizado.