¿Cómo surge el movimiento obrero?

Desde 1830 con la revolución industrial se generó un crecimiento de las ciudades y un problema de vivienda, de salubridad, fenómenos de burocratización y sucedió entonces lo que se denominó la cuestión social, que se expresaba en aquel entonces en hacinamiento, los trabajadores habitaban en las fábricas con sus familias, en muchos casos, o cuando vivían en las ciudades vivían en condiciones precarias de salubridad ni de vida digna. Posteriormente surge el movimiento obrero como una forma de organización frente a las malas condiciones laborales.

¿Qué ha sucedido en la actualidad con el movimiento sindical?

Podemos decir que no ha desaparecido para el caso de América Latina. En algunos países está progresando porque el Estado ha posibilitado que crezca. En Uruguay en los últimos gobiernos, el sindicalismo ha pasado del 20% al 60% de la población económicamente activa. En Argentina ha subido del 23% al 32% y en Brasil del 12% al 46%. No obstante, cuando el Estado le pone trabas a la constitución de sindicatos, se exacerba la violencia contra la actividad sindical como ocurre en Colombia, que es el país donde más sindicalistas asesinan en el mundo; entonces vemos que el sindicalismo decrece.

Hoy en día se habla del término flexibilización laboral para hablar de la variedad de condiciones laborales ¿Cómo se explica este fenómeno?

Los empresarios están buscando menos rigideces en las legislaciones laborales, que tengan efectivamente una mano de obra más barata y puedan hacer contratos con cortos periodos, jornadas laborales flexibles, que se puedan aumentar y disminuir de acuerdo con las exigencias del mercado, con remuneraciones igualmente flexibles. Hay otras formas de flexibilidad que se han generado como la cognoscitiva, en la que al trabajador se le exige permanentemente estar recalificándose de acuerdo con las exigencias del cambio en la producción misma de bienes y servicios.

¿Qué se podría reflexionar sobre los conceptos de competitividad y empleabilidad, muy utilizados en la sociedad contemporánea?

Hay una serie de categorías desde el Estado, desde la empresa, los medios de comunicación, que han puesto en juego, políticas públicas sociales de lucha contra la pobreza, a partir del concepto de la empleabilidad, es decir, el trabajador se tiene que hacer empleable y competitivo. Desde las instituciones educativas se forma alrededor de la competitividad, hacerse competitivo para el mundo laboral, hacerse empleable. Todo esto ha llevado a incentivar el individualismo en nuestras sociedades.

Según el DANE el desempleo descendió al 9.7 % ¿En ese sentido cómo se analiza la realidad del mundo laboral en la sociedad colombiana?

Yo no creo que sea solo del 9.7 %, eso hay que leerlo en relación con los indicadores del mundo laboral, es decir, la población con trabajo denominado independiente es de más del 47%. En el gobierno de Álvaro Uribe se transformó la metodología del DANE. En ese sentido, ser desempleado en Colombia según esta entidad, es no haber tenido ninguna ocupación remunerada en el último mes. ¿Qué significa eso? si una persona trabajó por lo menos una hora en el mes cada semana, ya es denominado como empleado. Por otra parte está el problema de las personas que no cotizan al régimen contributivo de salud. En el país, de la población económicamente activa, solo el 47.4% está afiliado, el 30% no tiene derecho a cesantías, el 40% pese a estar ocupada no cuenta con administradora de riesgos profesionales. Reducir el problema del empleo solo al indicador del desempleo es una lectura que al gobierno le conviene, sobre todo en procesos electorales pero que oculta otra serie de realidades que pueden dar un panorama más com

plejo de la realidad laboral en el país.

El pasado mes de abril la Universidad Nacional entregó a la sociedad 2.417 nuevos graduados. Desde su perspectiva ¿Cuál es el reto al que se enfrentan hoy día estos estudiantes en el contexto laboral?

El gran inconveniente es el desempleo. También está la competencia. En Colombia, las empresas prefieren tecnólogos porque son mucho más baratos. Otra situación es que los jóvenes puede que se empleen, pero en algunos casos no justamente para lo que se formaron. En muchos casos se forman para ingenieros pero tienen que poner una ferretería; para médicos, pero ponen una farmacia y combinarla con otros trabajos; dar clases en una universidad, hacer un pequeñas consultorías. Es una situación precaria, no solo en Colombia, es un fenómeno a nivel internacional. Las universidades generan una gran cantidad de egresados que el aparato productivo no tiene como ubicar, más en un país como el nuestro, que se está desindustrializando.

¿Y respecto a la propuesta del emprendimiento?

Es una política que puede operar ideológicamente. Pero la realidad es que esas empresas, en la gran mayoría de los casos, no pueden acumular capital para reinvertir en la empresa. Esta es una forma de asalaramiento indirecto. Por lo general, esas pequeñas compañías son subcontratistas de grandes empresas. Entonces, son medidas paliativas. En el país mueren muchas de esas pequeñas famiempresas, las estadísticas están ahí en las páginas de las cámaras de comercio.