Tener una buena alimentación es clave para sentirse bien y prevenir enfermedades. Una dieta equilibrada y variada permite promover una buena salud física y mental. Con relación a lo anterior, Tatiana Mejía, nutricionista y profesional del Área de Gestión Fomento Socioeconómico indicó: “ La alimentación balanceada es un pilar fundamental para el adecuado crecimiento, desarrollo y mantenimiento de funciones vitales del organismo que ocurren a lo largo de todas las etapas de vida del ser humano, ayuda con el fortalecimiento del sistema inmunológico o conocido también como el sistema de defensas, indispensable para combatir todo tipo de agentes que puedan ocasionar daños al cuerpo. Además, alimentarse adecuadamente disminuye el riesgo de padecer malnutrición por exceso como lo es el caso del sobrepeso y la obesidad y por déficit que es el bajo peso o la desnutrición y las complicaciones metabólicas, psicológicas, fisiológicas, entre otras que esto acarrea”.

Relacionado con esto, según la profesional Mejía, la dieta a tener en cuenta para contar con una alimentación adecuada es consumir frutas, vegetales de distintos colores, cereales como arroz, avena, raíces tubérculos y plátanos. También es clave el consumo de carnes que incluya rojas y blancas, así como lácteos y sus derivados tales como el queso, yogurt y huevos. La proteína vegetal también es muy importante y se debe consumir con frecuencia el aguacate, semillas o aceites de oliva o canola y leguminosas. Del mismo modo, el consumo de proteínas, grasas y carbohidratos; así como los micronutrientes vitaminas y minerales. 

Oferta alimentaria – Administración 2024 -2027

El Área de Gestión y Fomento Socioeconómico por medio del Programa de Gestión Alimentaria viene trabajando de tiempo atrás en la oferta y apoyo alimentario para los estudiantes en situación de vulnerabilidad. Teniendo en cuenta dicho propósito la nueva administración 2024- 2027 busca aumentar la cobertura con el apoyo alimentario brindado por el programa. De esta manera, se quiere llegar a un mayor número de estudiantes que por su vulnerabilidad socioeconómica no pueden acceder a una alimentación completa en medio de sus actividades académicas.

“Lo que se busca es que a través de diversificar la oferta alimentaria actual del campus en los diferentes espacios como comedores y cafeterías ofreciendo mayor cantidad de cupos destinados como por ejemplo, se abrirán convocatorias para los tiempos de comida desayuno o cena que son servicios que pueden aprovechar para el inicio o finalización de su jornada de clases diaria”, agregó la profesional Tatiana Mejía.

En el marco de la oferta de alimentación, actualmente se cuenta con el programa de Gestión Alimentaria donde se desarrollan diversas actividades que incluyen apoyo total y parcial alimentario en el que la Universidad asume una parte o totalidad del costo del plato de  comida que reciben los estudiantes dentro del sistema de comedores que se ubican al interior del campus. Dicho proceso se realiza por intermedio de la contratación de un tercero que realiza la producción y distribución de los alimentos y desde el programa como tal se realiza un proceso de interventoría y supervisión con el fin de garantizar que se cumplan los lineamientos en lo relacionado a un buen componente nutricional, higiénico sanitario, entre otros.

Actualmente el almuerzo que se sirve en el sistema de comedores de la Universidad consta de: sopa o crema en porción de 240 ml, proteína animal que puede ser pollo, carne de res, cerdo o pescado en porción de 90g y la proteína vegetal en porción de 90g a 120 g según el aporte proteico de la receta. También se ofrece cereal que puede ser arroz o pasta en diferentes presentaciones en porción de 100g. Tubérculo raíz o plátano que puede ser papa en distintas presentaciones y variedades, yuca, plátano arracacha, etc. Las verduras son también el ingrediente en los almuerzos que se brindan y éstas pueden ser cocida o crudas a modo de ensalada en porción de 60g y 80 g según la preparación. El jugo de fruta se ofrece de distintos sabores según la fruta de temporada en presentación con y sin azúcar añadida con porción de 210 ml. Finalmente, el postre puede ser de tipo panadería, casero tipo esponjados o gelatinas etc.

Adicionalmente, lo que busca la nueva administración en el futuro es aumentar la capacidad de comedores que actualmente funcionan dentro del campus UNAL, realizar obras de infraestructura para tener más espacios. También, se está planeando diversificar la oferta alimentaria en otros lugares que se puedan adjudicar para que los estudiantes reciban el apoyo alimentario respectivo, algunos ejemplos son brindar y tener diversidad de conceptos como bowls, platos vegetarianos y otras opciones que ayuden a cumplir con las necesidades que surgen de los cambios culturales y gustos alimentarios.

Por su parte desde el Área de Gestión de Fomento Socioeconómico extienden un mensaje a los estudiantes para que cada día más tengan clara la importancia de alimentarse bien para aportar a la salud  física y emocional por medio de una buena nutrición. “Para nosotros desde el área es fundamental trabajar constantemente para garantizar que los alimentos que son para nuestros estudiantes cuenten con una nutrición balanceada. Sabemos del gran impacto que hay en saber escoger los alimentos, ya que de esto depende un adecuado tránsito intestinal, los buenos niveles de concentración y rendimiento académico, etc. También sabemos que la alimentación en comunidad permite una mejor integración y sentido de pertenencia en el entorno donde ésta se consume y allí es donde apuntan algunas de las razones por la que la Universidad vela por garantizar este tipo de apoyos de forma sostenida durante la formación estudiantil, ese es nuestro mayor objetivo”, agregó la nutricionista Tatiana Mejía.

NR