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Lavarse las manos: Una forma de cuidado permanente

29 de octubre de 2020

El pasado 15 de octubre se celebró el Día Mundial del lavado de manos, y la Organización de  Naciones Unidas  (ONU), la instauró como una fecha para resaltar la importancia que tiene en la salud y fomentar las prácticas de higiene.  Con la situación de pandemia a causa de la enfermedad COVID19, el lavado de manos se convirtió en el hábito repetido que se debe tener presente en las poblaciones del mundo como una herramienta para evitar contagios y que debe hacer parte del autocuidado permanente para poder combatir el virus SARS CoV2.  El Ministerio de Salud y Protección Social, demuestran que el lavado de manos puede reducir la aparición de enfermedades diarreicas entre el 42 y 47% y así mismo, disminuye las infecciones respiratorias alrededor de un 30%.

En entrevista con En Plural, la doctora Ayda Consuelo Franco, médica del área de Salud de Bienestar Universitario, habló acerca de la importancia del lavado de manos para evitar enfermedades, el papel que cumplen los antibacteriales y el lavado adecuado que diariamente se debe tener en cuenta para ésta práctica.

En Plural: ¿Qué es la higiene de manos?

Aida Franco: La higiene de manos puede ser definida como un hábito corporal de necesaria incorporación, para preservar la salud de un individuo o de una colectividad evitando así, la propagación de enfermedades trasmisibles y producidas por diversos hongos, virus, bacterias y parásitos.

E.P.: ¿Por qué es importante el lavado de manos?

A.F.: Porque las manos facilitan el traslado de una superficie a otra, de agentes llamados contaminantes vivos o inertes, como sustancias físicas, químicas, o virus, hongos y bacterias patógenos o no patógenos y que dependiendo del estado salud, hábitos de higiene, ciclo vital, o estado del sistema inmune de quien tenga contacto con esas superficies, puede o no desarrollar diversos tipos de enfermedades. Ese tipo de transmisión de agentes entre superficies a través de las manos es la llamada contaminación cruzada y es producida por la llamada flora transitoria.

E.P.: ¿Qué diferencia hay entre lavarse las manos y desinfectarse las manos? ¿Cuál es mejor y por qué?

A.F.: La higiene hace referencia al lavado de las manos, ésta es  fundamentalmente para eliminar de manera mecánica, material orgánico como sangre, moco, flujo, materia fecal, saliva, suciedad y la flora transitoria- o contaminante de las manos. Lo importante es que el lavado se haga con agua y jabón y frotando las manos, el jabón produce una emulsión o una suspensión y el agua arrastra, la suciedad, material orgánico y la flora transitoria. La limpieza, disminuye el número de patógenos, pero no los destruye.

Desinfectar es, destruir a los agentes patógenos sean virus, hongos o bacterias, de la flora transitoria o flora residente o colonizadora de las manos, requiere el uso de antisépticos que son agentes químicos que no dañan la piel ni los tejidos.


"Por falta de higiene en las manos se pueden presentar enfermedades diarreicas, las enfermedades hepáticas, tipo hepatitis A,  enfermedades respiratorias tipo Influenza, el resfriado común e infecciones oculares”

E.P.: ¿Qué papel cumplen los geles antibacteriales y el alcohol en la desinfección de las manos?

A.F.: Desinfectar las manos en materia de prevención de enfermedades o promoción de la salud es quitar la oportunidad a virus, hongos o bacterias de multiplicarse y desarrollar una infección. Esto se hace frotando las manos con sustancias que contengan alcohol en concentraciones entre  el 70 y 95 % y que se presentan como alcohol antiséptico o gel glicerinado. El alcohol rompe la capa de lípidos que rodea a los agentes patógenos. 

E.P.: ¿En qué consiste un lavado adecuado de manos?

A.F.: El lavado adecuado, consiste en hacer una higiene de las diferentes zonas de las manos que por tener ciertas características de temperatura y humedad, alojan mayormente agentes patógenos, no patógenos y suciedad: palmas, dorsos, espacios interdigitales, interfalángicos, pulgar y uñas, durante mínimo 40 segundos.


"Experimentalmente se ha encontrado una viabilidad del virus en aerosoles de 1.1 a 3 horas. El virus SARS Cov 2 permanece viable a temperaturas de 22° y humedad del 60% entre tres horas y 1 a 4 días en superficies de papel, algodón, madera acero inoxidable o vidrio”

E.P.: ¿ En la pandemia actual por COVID 19 ¿Por qué es tan esencial hacer un lavado adecuado de manos y es visto como uno de los protocolos más importantes para evitar infectarse? ¿Cada cuánto hay que hacerlo?

A.F.: El virus SARS-CoV- 2 es un agente no vivo, cuyo material genético, viene envuelto en una capa lipídica o de grasa, que tiene incorporada la proteína S, con forma de espina y que es la que se une al receptor de la enzima Angiotensina II presente en las células del alveolo pulmonar, corazón y sistema nervioso y la que une la membrana del virus a la membrana celular del huésped para comenzar la infección. El virus se transmite entre humanos a partir del contacto directo con gotas respiratorias infectadas, o las manos o las superficies contaminadas con estas secreciones seguido del contacto con la mucosa de ojos, nariz o boca.

Cuando se lavan las manos con agua y jabón, la  molécula de jabón tiene una cabeza que es atraída por el agua y una cola que rechaza el agua y es atraída por  la grasa, esa parte hidrofóbica del jabón se introduce dentro de la grasa  del virus y rompe esa membrana de la capa de lípidos del virus, lo que impide su contacto con el receptor de la angiotensina y le  permite la  salida del material genético del virus, impidiendo su ingreso e infectividad celular. Dado que la viabilidad del virus, en aerosoles es de 1 a 3 horas, la frecuencia de lavado debe ser cada tres horas.


"Enemigos, pequeños, pero poderosos, pueden encontrarse en nuestras manos, una medida sencilla, económica y eficaz, que no consume mayor tiempo, como un simple lavado de manos, permitirá un desplazamiento de nuestra mirada del yo al nosotros, para al menos disminuir nuestra vulnerabilidad en medio de tanta incertidumbre”.

E.P.: Al ser el lavado de manos un protocolo relevante para evitar contagiarse por SARS CoV-2 y la frecuencia en la que hay que hacerlo. ¿Qué recomendaciones se deben tener en cuenta para evitar el deterioro de la piel?

A.F.: El lavado de manos frecuente, durante tiempos prolongados y el secado de manos con toallas haciendo fricción, puede generar, la inflamación superficial de la piel, llamada dermatitis por contacto irritativa, caracterizada por enrojecimiento, descamación y picazón en yemas de dedos y palmas de las manos. También pueden encontrarse exudados, costras o fisuras. En caso de sequedad y prurito, se aplican sustancias emolientes como la vaselina, varias veces al día o glicerina cada 12 o cada 8 horas, hasta lograr mejoría. El prurito puede manejarse con gasas empapadas en agua fría o en acetato de aluminio y se deben dejar en la piel por una hora. También se recomienda utilizar toallas desechables de papel para secar las manos, no usando la fricción sino, pequeños toques en la piel de las mismas.

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