En muchas ocasiones se escucha que tomar grandes cantidades de líquido es muy importante para la salud y el bienestar. La hidratación cumple un papel fundamental en los órganos y funciones fisiológicas, por ejemplo la regulación de la tensión arterial, la digestión, entre otras. Adicionalmente, el agua compone más de la mitad del peso corporal humano y de acuerdo a esto, hay porcentajes que varían según la edad de una persona. Por ejemplo, en los adultos puede haber necesidad de consumo de agua en un 50% mientras que en los recién nacidos de un 80%.
En general la ingesta adecuada es clave para mantener un buen estado de salud. En entrevista con En Plural hablamos con el doctor Barnard Antonio Bello Cáceres, médico de la División de Salud de la Dirección de Bienestar Universitario, quien nos habló acerca de la importancia de una adecuada hidratación, cuáles con las funciones del agua en el cuerpo, las consecuencias de una deshidratación, entre otras.
E.P.: ¿Como se encuentra distribuida el agua en nuestro cuerpo?
B.A.B.C.: La mayor parte del agua corporal total algo así como las 2/3 partes se encuentra al interior de las células que constituyen cada uno de los órganos que componen nuestro cuerpo. El tercio restante se ubica en el fluido extracelular, siendo el constituyente principal de la sangre y la linfa circulante, líquido intersticial (espacio entre las células) y los fluidos de otros órganos como fluido gastrointestinal, cerebroespinal, ocular, etc.
El porcentaje de agua varia también de acuerdo con el tipo de célula desde un 10% en células adiposas (tejido graso) hasta un 75% en el tejido muscular.
E.P.: ¿Cuáles son las funciones del agua en nuestro cuerpo?
B.A.B.C.: El agua está implicada en diversas funciones que van desde transportar nutrientes (sangre - linfa), excretar productos de desecho (orina y heces), mantener la temperatura corporal (sudor), lubricar las articulaciones (líquido sinovial) Todo esto, para conservar la homeostasis, que es el equilibrio del medio interno, interactuando continuamente en múltiples procesos de regulación corporal, especialmente compensando la concentración de sustancias químicas disueltas dentro o fuera de la célula.
E.P.: ¿Qué pasa cuando no bebemos suficiente agua?
B.A.B.C.: En el caso de beber una cantidad insuficiente de agua se inicia la deshidratación celular, pues las células sacrifican su humedad para mantener el volumen extracelular y el equilibrio de electrolitos, ya que todo el tiempo estamos perdiendo agua incluso en la respiración. Si esto no se corrige, empezamos a sentir sed que es la intervención de nuestro sistema nervioso central ordenándonos que tomemos agua, pero esto solo ocurre cuando los mecanismos reguladores se están agotando ósea es una etapa tardía, por lo que es importante mantener la hidratación antes de tener sed.
E.P.: ¿Cuáles son las consecuencias mayores que pueden generar el no hidratarse adecuadamente?
B.A.B.C.: Por diversas razones puede ocurrir la deshidratación. Por ejemplo por enfermedades, fallas en el mecanismo regulador de los electrolitos, aumento de grasa corporal, etc. Cuando esto ocurre empezamos a excretar menos cantidad de orina, ésta se torna turbia y pueden ocurrir calambres, sentimos la boca seca, nos duele la cabeza, hasta nos sentimos aturdidos e irritables. Si la deshidratación es severa, puede haber ausencia de orina, sensación de frío, pérdida del tono muscular, caída de la presión sanguínea, taquicardia (aumento de la frecuencia cardiaca) o taquipnea (aumento de la frecuencia respiratoria).
E.P.: ¿Cuáles son las enfermedades que causan deshidratación?
B.A.B.C.: Las enfermedades más frecuentes son las infecciones intestinales virales o bacterianas que aumentan la presencia de agua en las deposiciones, pero también patologías como la diabetes que conducen a la deshidratación crónica ya que la presencia de grandes cantidades de glucosa llevan a alteración de los niveles de potasio y esto altera el equilibrio previamente mencionado. Ocurre además, en pacientes hipertensos que exceden el uso de diuréticos (medicamentos para eliminar agua) se producen alteraciones en los electrolitos a perdidas por orina. También, a quienes padecen de edemas por pérdidas de líquido al espacio extracelular, sin olvidar las pérdidas de grandes porciones de piel por quemaduras ya que la piel recubre todo el cuerpo y es fundamental mantenerla indemne. Otra población que se deshidrata fácilmente es la obesa, pues como vimos antes las células grasas almacenan poca cantidad de agua.
E.P.: ¿Qué tipo de bebidas es mejor consumir?
B.A.B.C.: Lo ideal es beber agua pura, pero es muy común encontrar resistencia a beber agua sola, ya que nuestra cultura favorece la ingesta de bebidas azucaradas, embotelladas y jugos de frutas artificial. El agua potable contiene electrolitos esenciales para realizar su función, el azúcar no es necesario para el cuerpo y los saborizantes y colorantes que se usan en la elaboración industrial de estas bebidas están más cerca de ser tóxicos que beneficiosos. Además, las posibles bondades de bebidas como tes o jugos de fruta no llegan a constituir en algunos casos ni el 0.1% del producto.
En el caso de los jugos de frutas elaborados en casa la mayoría de las veces el colado quita la fibra natural de la pulpa que favorece la adsorción de agua, pero siempre serán una alternativa a las bebidas industriales en especial para poblaciones como niños o ancianos mayores. Por otro lado, tomar bebidas hidratantes podría paradójicamente favorecer la deshidratación ya que en la mayoría de los casos son hiperosmolares tienen cantidad excesiva de electrolitos y glucosa.
E.P.: ¿ Qué tipo de agua se debe consumir?
B.A.B.C.: Cuando las condiciones impiden beber agua del grifo, no hay más remedio que tomar agua empacada y ahí es importante tener en cuenta el empaque. Se debe preferir las presentaciones de mayor volumen, tanto por el efecto de los plásticos de un solo uso en el medio ambiente ya que demoran siglos en ser descompuestos, como por la probable contaminación del agua por contacto en especial con bisulfitos y bisfenoles propios de la elaboración de los empaques. Por eso, reenvasarlas en recipientes limpios de vidrio bien sea para transporte o almacenamiento es la mejor manera.
EP: ¿Qué otras recomendaciones se deben tener en cuenta para el manejo del agua?
B.A.B.C.: Hervir el agua puede matar los patógenos, pero no elimina excesos de cloro o flúor. Filtrarla, puede impedir el paso de sustancias tóxicas y patógenos dependiendo del diámetro de los poros, destilarla puede eliminar patógenos y metales, pero es muy costoso. Ozonizarla puede matar virus y bacterias, pero no elimina otras sustancias, entonces no hay un método infalible y conveniente para todos.
Debemos buscar el método que se ajuste a nuestra economía y costumbres de consumo, siendo conscientes que el agua es fundamental para nuestra supervivencia, es un recurso escaso, que se contamina fácilmente y no es renovable.