El lenguaje cumple un papel fundamental en la interrelación de las personas y de suma importancia porque le permite establecer comunicación con otros seres vivos y de esa manera poder vivir en comunidad y participar de proyectos conjuntos.
En Plural dialogó con el profesor Rubén Darío Flórez Arcila, egresado de la Facultad de Letras y Lingüística de la Universidad de La Amistad en Moscú (Rusia) y actualmente adscrito al Departamento de Lingüística de la Universidad Nacional de Colombia, a cargo de las asignaturas de semiótica, cultura y comunicación, teorías de la comunicación y de lectoescritura para la sede Tumaco.
En esta oportunidad, el poeta, traductor y diplomático, nos explicó sobre la diversidad del lenguaje y la manera de entender sus cambios e interpretaciones.
En Plural: ¿Qué es el lenguaje?
Rubén Darío Flórez: El lenguaje es por excelencia la facultad de expresarse de diferentes maneras para auto conocerse e interactuar con los demás, expresando pensamientos y sentimientos de una manera determinada. Los seres humanos somos animales simbólicos y seres que establecemos un contacto o una acción de distintas formas, por medio de la lengua escrita, de los símbolos, alegorías, la danza, los gestos a través de sistemas de signos, que nos va definiendo y permite identificarnos y sobre todo comunicarnos de muchas maneras con los demás y el entorno.
E.P.: ¿Cómo es el lenguaje de los jóvenes hoy en día?
R.F.: El lenguaje tiene una relación con la diversidad cultural. El lenguaje de los jóvenes de hoy se transforma y tiene cambios porque la cultura vive de las épocas. Los adolescentes quieren dejar su huella en esa esfera tan importante para la interacción con los demás. Es importante y claro que no hay un solo lenguaje, hay muchas clases. Un ejemplo es la forma de saludarse, tienen un micro ritual y distintos modos de contacto: el visual, escrito y simbólico. Además, lo que hacen lo manifiestan y comunican de una manera diferente a otras personas, porque son de otra generación.
E.P.: ¿Qué relación tiene el lenguaje con los hábitos de lectura?
R.F.: Tiene una relación estrecha. La lectura ocupa un lugar muy importante en el proceso educativo, porque se amplía el conocimiento de las construcciones sintácticas de la memoria cultural colombiana, latinoamericana, y universal. La lectura es un medio privilegiado de la formación lingüística de los jóvenes y niños adolecentes cuando están en su periodo de aprendizaje en el colegio y en la universidad.
Adicionalmente, la lectura es una fuente de información, es un instrumento para crear la personalidad lingüística pero también a través de ella se consolida el pensamiento simbólico que caracteriza al lenguaje. Por medio de la lectura se desarrollan procesos cognitivos, de síntesis, resumen y de asociación, entre otras. La relación lectura y lenguaje es en conjunto, porque la lectura sirve para poder representar procesos sociales, sicológicos y físicos en la mente, a través de procedimientos lingüísticos de íconos y símbolos para interpretar y vivir la realidad.
E.P.: ¿Cuáles son los factores que han hecho que el lenguaje se transforme o cambie?
R.F.: En la vida de los sujetos o los individuos hay un intercambio de significaciones ante diversas situaciones de la cotidianidad, es decir diferentes maneras de ver las cosas. Esto tiene que ver con la semiótica, el modo de comunicarse por medio de signos visuales, acústicos, y formas lingüísticas de acuerdo a lo que piensan, sienten y se identifican en un contexto. El lenguaje se va transformando con la época.
Los adolescentes son un grupo generacional y esa es una mirada importante sobre el lenguaje, porque éste tiene distintas enunciaciones e interpretaciones. Por esto, en la cotidianidad es tan fácil detectar la diferencia de cómo habla un niño, un hombre de dinero, un adolescente milenium o una persona de diversa escala socioeconómica. Allí se identifica la diversidad de lenguajes y la transformación de los mismos de acuerdo con los contextos y las épocas.
Hay cambios como marcas de tiempo, generacionales. Hoy en día los jóvenes se saludan diferente a como lo hacían hace 20 años o 10 años. Por ejemplo la palabra “marica” para algunas personas adultas es una grosería o un irrespeto, para los jóvenes de ahora es una marca de cultura urbana y netamente colombiana. Lo que para unos es un insulto para otros es una manera de saludar.
E.P. ¿Qué recomendaciones sobre el buen uso del lenguaje da a los jóvenes y a la comunidad universitaria?
R.F.: Considero que lo más importante es contar con un buen hábito de lectura. Los jóvenes deben aprovechar la etapa universitaria, leer y releer mucho, cogerle el gusto e interés a la lectura. Esto ayudará a incrementar el léxico y crecer en vocabulario. Por último buscar palabras nuevas para los textos, significados, sinónimos para así enriquecer el lenguaje.