“Nos hemos distanciado del otro, asociamos la voluntariedad con caridad porque continuamos con una percepción de sociedad asistencialista que históricamente nos ha convocado a dar lo que nos sobra” aseguró David Gamboa, miembro de la red juvenil de voluntariado Ubuntu, en el marco de este foro que se centró en reflexionar frente a la esencia de ser voluntario en la sociedad actual y conocer su estado en los entornos universitarios.

El camino de emprendimiento hacia una política dio sus primeros pasos durante este encuentro, cuyo propósito consistió en establecer en primera instancia el verdadero significado del ejercicio voluntario, teniendo en cuenta que muchas iniciativas se asocian a este, no obstante los condicionantes ya sean económicos, académicos o de retribución las alejan de su real esencia.

“La responsabilidad social, las practicas comunitarias y la extensión solidaria se confunden con el voluntariado por que implican una acción social. Sin embargo la diferencia se encuentra en que los primeros están mediados por un condicionante ya sea de tipo académico, económico o deben acogerse a una convocatoria, en cambio esta apuesta involucra ac¬tos desinteresados por que como su nombre lo indica nace da la voluntad e implica dedicación y compromiso”.

Esta fue la tesis central de Victoria Salazar, egresada y funcionaria de la UN Manizales, quien se ha dedicado a seguirle la pista al voluntariado en el mundo y a promover en su sede, redes de apoyo para quienes por iniciativa propia quieren compartir con sus semejantes.

Durante años de estudio esta manizalita consagrada al ejercicio de dar sin esperar nada a cambio, ha encontrado por ejemplo, que a nivel latinoamericano hay un destacado movimiento voluntario. En especial en países como Brasil y Chile, donde las propuestas juveniles impactan incluso las políticas de Estado debido a su alto nivel de organización.

En el caso colombiano y más exactamente en la Universidad Nacional sede Manizales, la profesional destaca que aunque la Institución pertenece a la Red Iberoamericana de Voluntariado Universitario (Redivu), tan sólo el 12% de los estudiantes manifiestan participar o haber participado en una acción voluntaria y únicamente el 18% de los docentes se han vinculado a este tipo de iniciativas.

Para el caso de los funcionarios administrativos de este campus, el panorama es más alentador puesto que el 30% de esta población hace parte de grupos de voluntarios, entre los que se destaca el grupo de Brigadistas de la UN.

Experiencias para aprender

Como parte de la gesta liderada en Manizales por Victoria Salazar y un completo equipo de profesionales, la sede ha venido construyendo el proyecto de voluntariado. Dicha causa ha contado con logros y dificultades enmarcados en un interesante proceso de aprendizaje.

“Actualmente se apoyan ideas en diferentes temáticas, como es el caso de un estudiante del Chocó a quien su paso por equipos de fútbol le enseño que su gusto por esta disciplina no podía ser impedimento para ingresar a la Universidad Nacional, y por ello actualmente lidera un proyecto de escuelas de fútbol con niños de zonas aledañas al campus, para inculcarles a través de su amor por este deporte el agrado por los estudios” resalta Salazar.

Al lado de la experiencia de Manizales se destacaron durante el evento ideas de la sede Bogotá, como la Red Juvenil Ubuntu quienes desarrollan proyectos pedagógicos en colegios distritales, para generar espacios alternativos de formación en los valores, el liderazgo y la aplicación de proyectos, en mejora de la calidad de vida.

“Son muchas las iniciativas que existen al interior de la Universidad pero que se encuentran en el anonimato y este tipo de espacios permiten visibilizarlas, y configurar nuevas redes de apoyo y convocar a nuevos miembros”, enfatizó Francy Marroquín del colectivo “Vida y Letra” que trabaja en procesos de alfabetización en el barrio Arborizadora Alta.

Como producto del foro, la Capellanía continuará con la realización de nuevos encuentros de socialización de experiencias para conformar la red que permitirá entablar redes de apoyo conjunto, así como encauzar a los interesados en la práctica del voluntariado de acuerdo a sus intereses, a través de grupos internos y externos